que alumbra la inexistente, nada.
domingo, 25 de diciembre de 2016
Noche
que alumbra la inexistente, nada.
martes, 13 de diciembre de 2016
Desesperanzado
martes, 15 de noviembre de 2016
Tristeza
lunes, 7 de noviembre de 2016
La Sinfonía del Dolor
martes, 1 de noviembre de 2016
Transcendencia
martes, 25 de octubre de 2016
Misterio
viernes, 21 de octubre de 2016
Te quiero
miércoles, 19 de octubre de 2016
Delirio
martes, 4 de octubre de 2016
Ficciones
sábado, 30 de julio de 2016
Fantasmagoría
lunes, 25 de julio de 2016
Ser un Genio
Leyendo a Hemingway aprendí que el genio es un hombre ante la vida. Leyendo a Poe comprendí que también podía ser la deformación de lo grotesco a lo bello.
Continué con Becquer y vislumbré, en un prófugo destello de creatividad, como el genio era un delirio que germinaba en el jardín de nuestra alma.
Incluso leí a Bukowski y no tuve otro remedio que asumir al genio como un sensible espíritu solitario. Un genio vive solo, rezuma soledad en cada uno de sus poros y los ahoga con alcohol.
Pero si piensas que Hemingway no necesitó de la soledad para convertirse en un verdadero hombre, si crees que bukowski no necesitó ser un hombre para triunfar frente a su soledad. O si crees que Poe no enloqueció para encontrar la chispa de su ingenio y si no necesitó Becquer la oscuridad para encontrar la luz de la poesía en un minúsculo sueño. No entiendes que un genio no lo es por ser único. Todos los seres de este mundo somo únicos. Tan solo unos pocos lograron ser genios porque supieron encontrar en su obra y vida la profunda y oculta verdad de cada uno que nos hace brillar y ser auténticos.
sábado, 16 de julio de 2016
Musa
domingo, 10 de julio de 2016
Comics
Yo era un lector de comics. Pero claro, yo no era un lector de comics de los que abrían el tomo, pasaban página y después esperaban toda la semana, hasta que llegara el siguiente tomo de una serie infinita de tomos una, otra, y otra vez una y luego, otra vez.
Joder, yo era un lector de comics. Yo leía los comics clásicos de superheroes y era de los que creían que el bien existía. Claro coño, de esas veces que pensabas que la gente era justa, tal como querían hacerte creer a ti y que los comics de superheroes sólo eran un recordatorio, un aviso de lo mal que podía ir el mundo, lo absurdo que eran los villanos y lo emocionante y sencillo que era derrotarlos. Aquellas coloridas hojas llegaban a convencerte de lo divertido que era ser buena persona y tan milagrosamente te lo creías. Yo era un lector de comics. Cierto, he dicho era, por desgracia ya no...Se burlaban, me los tiraban y la gente sólo veía en las viñetas mera violencia vulgar.
Gente que quería que creciese y madurase que viese que el mundo era en verdad injusto, que no puedes confiar en nadie y sólo estás tú para ayudarte. Querían que comprendiese que en el mundo no existen los héroes o lo que es peor, que los héroes son el común de las personas que en su día a día luchan por sobrevivir ante las injusticias de este sistema.
Querían que creyese en gente que no movería ni un solo dedo para ayudar a los demás si no se les daba nada a cambio. Pero como he dicho yo era un lector de comics y sabía, que eso no era ser un auténtico héroe. Ser un héroe significa entender que el ser humano “tan solo necesita un mal día para convertirse en una pesada broma de la vida” y por ello resistir y luchar para ayudar no sólo al prójimo, sino también a tu enemigo y así evitar que la gente se hunda en la soledad de su desesperación. Ser un héroe significa que “si tienes el poder para cambiar la vida a mejor, lo haces porque grabado en tu corazón late la responsabilidad de cada acto”.
Yo no sé si los héroes de verdad existen en este mundo y si existen, no sé si lo han sido sólo unos minutos o toda su vida. Yo me quedo con una frase que le dijo el Doctor Extraño a nuestro amigo y vecino Spiderman:
“El mayor don que podemos recibir es tener la oportunidad, una sola vez en nuestra vida de marcar la diferencia. ¿Comprendes cuantos dones has recibido? ¿Cuántas veces has marcado la diferencia? Si te detienes ahora, todas las veces que has marcado la diferencia antes habrán sido para nada. Y todos los que te importan ahora hoy, morirán”
No juzguéis a la gente que lee comics y entender que toda obra que nace del arte, puede tener el don de llegar a ser una obra maestra en nuestras vidas.
PD: De niño me encantaba Spiderman y quería aclarar, con la fútil esperanza de que esto se lea, que no, joder que no. La esencia de Spiderman no es la de un chico tímido y reservado que todo le sale mal como quieren reflejar en la trilogía de Sam Raimi en el cine. Tampoco es la oscuridad, soledad e incomprensión de la adolescencia como quieren reflejar en la segunda saga llevada al cine del personaje. Y ni mucho menos es la de un crío que parlotea y parlotea sin ninguna gracia con tal de no cagarse en los pantalones como quieren reflejar en la última película donde aparece el superhéroe.
La esencia de Spiderman es ni más ni menos que la de aprender a vivir tu día a día. Mientras comprendes el verdadero valor y la verdadera responsabilidad de tus dones para hacer de este mundo, un lugar mejor.
Tan sólo quería decir eso. Bueno eso y que Hollywood apesta.
martes, 5 de julio de 2016
Envidia de la Luna
lunes, 4 de julio de 2016
Sabor
domingo, 3 de julio de 2016
Real
sábado, 2 de julio de 2016
Surrealismo
dio a tus ojos brillar.
Qué noche de otoño
se te concedió amar.
Que con solo
tu perfume respirar,
aulló solitario el lobo
al alma henchida de llorar.
Mas ahora...
Cual viento en la tempestad.
siento como atesora
una fría condena
hiriendo al genio vivaz.
Qué lágrima se perdió en la arena
que secó no solo mi pena
sino también mi libertad.
Oh metáfora de sal
símil del taciturno soñar.
Pues vive monótono inmortal
por siempre ciego al fulgor del mar.